Lautaro Acosta se despide del fútbol y deja un mensaje lleno de emoción.

Lanús se despidió de su última batalla con un 1-0 en contra ante Tigre, pero la verdadera historia se tejió entre las ovaciones que resonaron en La Fortaleza. A los 37 años, el emblemático Lautaro “Laucha” Acosta, se retiró del fútbol profesional, provocando una conmovedora respuesta en las gradas.

Acosta cierra un capítulo glorioso en su vida deportiva, un viaje que lo elevó al estatus de leyenda en su club. Con la camiseta granate, cosechó títulos que son historia viva: dos campeonatos de Primera División, una Copa Sudamericana, la Copa Bicentenario y la Supercopa Argentina, convirtiéndose en el pilar de la era dorada del club. Su aventura en Europa no fue menos prolífica, agigantándose con la consecución de la Copa del Rey en el Sevilla.

Además, representando a la Selección Argentina, formó parte de una generación que nunca será olvidada: campeones del Mundial Sub 20 en 2007 y ganadores de la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Pekín 2008, compartiendo el campo con titanes del fútbol como Lionel Messi, Ángel Di María y Sergio Agüero.

El clímax de su despedida llegó tras el pitazo final, cuando Lanús celebraba el título de la CONMEBOL Sudamericana. Acosta, con el corazón en la mano y la voz entrecortada, expresó ante su gente:

“Quiero agradecer a estos guerreros, mis compañeros, que me ayudaron cuando no pude más. Siempre estuvieron para levantarme”.

“A ustedes, los hinchas: estoy feliz, estoy realizado. Me voy siendo el hombre más feliz del mundo. No hay palabras para describir lo que estoy sintiendo.”

“A mi familia, a mis viejos, los amo con todo mi corazón. A mis hermanos, a mis sobrinos… los quiero mucho. Gracias también a los dirigentes que me ayudaron a seguir.”

Entre lágrimas y abrazos, el Laucha vivió su última función como futbolista. Se va un atleta, pero perdura un símbolo viviente: el hombre que supo encarnar como pocos la esencia, el carácter y el orgullo de Lanús.

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